El presidente electo Donald Trump anunció su intención de establecer un “Servicio de Impuestos Externos” (External Revenue Service) para recaudar aranceles e ingresos relacionados con bienes extranjeros. Este movimiento busca reforzar su enfoque proteccionista y presionar a socios y adversarios comerciales para que contribuyan «su parte justa».
¿Qué es el Servicio de Impuestos Externos?
Según Trump, esta nueva entidad:
- Gestionaría aranceles y gravámenes sobre importaciones extranjeras.
- Recaudaría ingresos provenientes de empresas y países que, en sus palabras, “ganan dinero a costa de Estados Unidos”.
- Fecha propuesta de inicio: 20 de enero de 2025.
Sin embargo, no se ha detallado si esta oficina sería una entidad independiente o si reorganizaría las funciones existentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), que actualmente recauda aranceles.
El enfoque arancelario de Trump
Durante su campaña, Trump propuso:
- Aranceles mínimos: 10%-20% para importaciones generales.
- Gravámenes altos: Hasta 60% para productos provenientes de China.
- Sanciones adicionales: Contra México, Canadá y otros países si no fortalecen sus fronteras para combatir la inmigración ilegal y el tráfico de drogas.
Críticas y preocupaciones
Economistas y políticos han señalado los riesgos de estas medidas:
- Impacto inflacionario: Los aranceles aumentarían el costo de productos importados, afectando a los consumidores estadounidenses.
- Desestabilización del comercio: Podrían redirigir o reducir los flujos comerciales globales, afectando cadenas de suministro.
- Dudas sobre los ingresos: Expertos cuestionan si estos gravámenes generarían los recursos prometidos.
Los demócratas calificaron la idea como “vaga” y enfatizaron que una reorganización de esta magnitud requeriría la aprobación del Congreso.
Estrategia gradual
Fuentes cercanas al equipo de transición han sugerido que los aumentos arancelarios podrían aplicarse de manera progresiva para reducir impactos inflacionarios y ganar ventaja en negociaciones internacionales.
La propuesta del “Servicio de Impuestos Externos” es un reflejo del enfoque económico de Trump, centrado en el proteccionismo y la autosuficiencia. Sin embargo, su implementación enfrenta retos políticos, económicos y sociales que podrían definir el curso de las relaciones comerciales de Estados Unidos en los próximos años.